En Reciclaje y Gestión Medioambiental, creemos que el compostaje es una herramienta poderosa para reducir residuos y enriquecer el suelo de manera natural. Sin embargo, muchas personas desconocen que pueden compostar algunos elementos cotidianos que terminan en la basura. Aquí te presentamos 10 cosas inesperadas que puedes agregar a tu compost:

1. Bolsitas de té

Las bolsitas de té (sin grapas ni plásticos) son una excelente adición al compost, ya que son biodegradables y ricas en nutrientes para las plantas.

2. Cáscaras de huevo

Lava las cáscaras y trózalas antes de compostarlas. Aportan calcio, un mineral esencial para el suelo.

3. Cartón sin tinta

Cajas de huevos, tubos de papel higiénico y otros cartones no impresos son ideales como materia seca para equilibrar el compost.

4. Pelo humano o de mascotas

El cabello es una fuente de nitrógeno y se descompone lentamente, liberando nutrientes al suelo.

5. Tapones de corcho natural

Asegúrate de que sean de corcho real, no sintético, y trózalos en pedazos pequeños para facilitar su descomposición.

6. Servilletas y papel de cocina usados

Siempre que no tengan productos químicos o grasa excesiva, estos papeles pueden servir como materia seca.

7. Residuos de plantas de interior

Hojas secas, flores marchitas y recortes de plantas son perfectos para el compost.

8. Posos de café y filtros

Ricos en nitrógeno, los posos de café son un complemento ideal. Los filtros de papel también pueden compostarse si no tienen tintas o tratamientos químicos.

9. Cáscaras de frutos secos

Cáscaras como las de nueces, pistachos o almendras pueden compostarse, aunque tardan un poco más en descomponerse.

10. Mondas de cítricos

Aunque muchas personas creen que los cítricos no deben compostarse, las cáscaras de limón, naranja o pomelo son perfectamente compostables en pequeñas cantidades.

Consejo final

Recuerda mantener un equilibrio entre materiales secos («marrones») y húmedos («verdes») para un compost saludable. Evita agregar materiales como plásticos, carnes o lácteos, ya que pueden atraer plagas o dificultar la descomposición.

El compostaje no solo reduce tus residuos, sino que también mejora la calidad del suelo. ¡Empieza hoy mismo y contribuye a un planeta más sostenible!