Existen multitud de maneras sencillas de reducir la huella ecológica. Un acto que proporcionará a nuestro planeta grandes beneficios, no solo para él sino también para las futuras generaciones.
Es nuestro deber como ciudadanos contribuir en la medida de lo posible a que la contaminación comiencen a reducirse. Es por eso que en el día de hoy te mostramos una serie de recomendaciones para poder lograr este objetivo.
1. Cambia el papel de cocina por alternativas reutilizables
Una forma sencilla de empezar un estilo de vida con menos despilfarros es dejar de utilizar el papel de cocina y empezar a usar alternativas reutilizables como los paños o las servilletas de tela. Hazte con un juego de paños de microfibra para uso diario o con servilletas de tela para secar los líquidos derramados o las manos. Puedes utilizar también unos paños de lino y algodón para conservar las sobras y demás productos.
2. No utilices bolsas de plástico
Cuando estás en el supermercado y te das cuenta de que te has olvidado la bolsa reutilizable en casa, las bolsas de plástico son una solución rápida, es cierto, pero estas son realmente dañinas para el medio ambiente. Por suerte, hay un montón de alternativas innovadoras. Existen bolsas hechas con cera de abeja que también pueden usarse para envolver sobras de queso, frutas, verduras y pan, así como bolsas reutilizables de silicona para guardar frutas, verduras y hasta líquidos. Son muchas las alternativas para ser más ecológicos en la cocina.
3. Deja de tirar los residuos orgánicos a la basura
Otro modo estupendo de ser más ecológico este año es empezar a separar la basura orgánica en otro contenedor para hacer compost. Existen muchos tipos de contenedores de uso doméstico para este fin, incluso para quienes no disponen de mucho espacio o para quienes prefieren un diseño más elegante de acero y madera. Para prevenir los malos olores, se recomiendan los diseños en acero inoxidable y filtros de carbón.
4. Sustituye los envoltorios de plástico por una alternativa más ecológica
Los envoltorios de plástico o el film transparente se utilizan para cubrir muchos alimentos y preservarlos más tiempo. Sin embargo, ahora existen muchas alternativas al plástico: papel de cera para envolver y preservar alimentos y fundas de lino y algodón para cubrir ollas o tuppers. También hay tapas de silicona para cerrar cualquier envase del frigorífico. Son duraderas y se pueden estirar.